Dos bebés gemelos recién nacidos

¡Milagro! El abrazo de su madre le devuelve la vida un bebé

Tras un parto prematuro, uno de los mellizos nació muerto y revivió gracias al contacto directo con su madre

La realidad, a veces, supera a cualquier película de ciencia ficción. Hay cosas que a veces la ciencia no puede explicar pero felizmente suceden. Gracias a estos locos acontecimientos, hoy Kate y David disfrutan de sus pequeños hijos Emily y Jamie.

La pareja australiana había estado buscando durante años formar una familia. Fruto de varios intentos, Kate quedó embarazada de mellizos. Luego de meses de gestación y altas expectativas, el parto se dio de manera adelantada. Los niños nacieron prematuros, concretamente lo hicieron sesenta días antes de lo previsto.

Debido a varias complicaciones, los médicos informaron a la pareja australiana que su hijo Jamie tristemente no había sobrevivido al parto. Esto les hundió en un inmenso dolor, ya que llevaban mucho tiempo esperando este momento.

Madre agarrando la manita de su bebé recién nacido
Esta historia nos demuestra que el amor de una madre puede con todo | Getty Images

Una vez recibida la noticia, los padres del bebé fallecido solicitaron al personal del hospital que por favor trajeran al niño junto a ellos para despedirse de él. Una vez el bebé llegó a los brazos de su madre, quizás por intuición o por azar, esta le quitó la ropita y lo abrazó para darle calor. De repente,  el bebé comenzó a realizar pequeños movimientos con su cuerpo y volvió a respirar.

La pareja, atónita ante lo que acababa de suceder, empezó a llorar de emoción. Conscientes de que cada minuto era vital para que su hijo sobreviviera, rápidamente llamaron a los enfermeros y médicos, quienes tampoco bajaban del asombro. Finalmente tras varias pruebas el pequeño sobrevivió y pudo reencontrarse con sus padres.

“No lo dejamos de tocar desde el momento que llegamos a casa, porque sabíamos lo valioso que era el contacto de piel a piel: fue lo que salvó su vida”, cuenta Kate.

Esta experiencia realmente es insólita y demuestra una vez más la importancia del contacto directo del recién nacido con su madre. Y es que, como ya bien dice el dicho, "el amor de una madre puede con todo".